Realizar cursos de osteopatía en nuestro país, con buenos profesionales, ya es posible. Aunque sea una titulación oficial, ya que no está reconocido todavía en España (al contrario que en muchos países de Europa) estos cursos tienen total validez de cara a los clientes y a poder ejercer la profesión.

Un buen osteópata es muy valorado y suele tener ingresos fijos bastante elevados ya que, los problemas que se solucionan con su práctica son muy variados. Por eso, es una gran oportunidad para quienes buscan elegir su profesión por primera vez y también para quienes se reciclan para conseguir nuevas oportunidades.

1) Fórmate en una buena escuela

Escoge una escuela que te ofrezca una buena formación y que te permita elegir el tipo de clases que te resulten más cómodas. Algunas escuelas, como Kyreo, permiten que sus alumnos reciban parte de la formación a distancia, lo que hace mucho más cómodo el proceso para muchas personas.

De esta manera, solo se desplazarían para las clases prácticas, recibiendo su formación teórica en el hogar de una manera muy cómoda y que le permite conciliar mejor su vida personal y sus estudios.

2) Trabaja por cuenta ajena para ganar experiencia

Una vez que ya se tiene el título el alumno podría trabajar por su cuenta perfectamente e incluso montar su propio negocio. Pero, lo habitual, es que se trabaje por cuenta ajena, sobre todo en clínicas, gimnasios o spas para ir ganando experiencia.

Cuando se puede elegir entre varios trabajos es recomendable optar por aquellos en los que se podrá trabajar junto a personas con mucha experiencia de las que poder aprender y también en locales con mucha clientela para poder ver todo tipo de casos y realizar técnicas diferentes.

3) Trabaja a domicilio si te cuesta comenzar

Dependiendo de dónde vivas, las oportunidades de trabajar por cuenta ajena pueden ser mayores o menores. Pero con el título en mano, nada impide a una persona comenzar a trabajar a domicilio. Es una de las formas más económicas de comenzar ya que, un alta nueva en autónomos, permite abonar una tarifa plana muy económica durante los primeros años y cotizar a la vez que se van ganando clientes y se abre camino en el negocio.

Si todo va bien, se podrá ahorrar para montar una consulta a la que ya podrán acudir todos esos clientes que se han logrado hacer con el paso del tiempo y ganar otros nuevos.